Un loco. Un sociópata.
Un monstruo con rostro humano, el demonio del Frente Norte, la horca sonriente. Terminé interpretando perfectamente a «Yurian».
Me refiero a ese personaje astuto y de ojos rasgados, perverso y trastornado, al que todos en el Imperio temían.

Bookmark
Followed by 95 people
Comenta